viernes, 12 de septiembre de 2008

Cena con Monseñor Horacio Valenzuela


Con mucha alegría queremos darle las gracias al Señor por permitir a este Secretariado poder compartir nuevamente con nuestro Pastor, Monseñor Horacio Valenzuela Abarca, una rica y muy sencilla cena, pero a la vez muy significativa para nosotros, en donde se nos brindo la oportunidad de comentarle directamente a Monseñor, la activa y central presencia de nuestro Señor Jesucristo, en todas y cada una de las actividades de nuestro querido MCC durante estos casi dos años en que le ha prestado servicio este Secretariado. En esta oportunidad Monseñor se mostró particularmente distendido y a la vez muy interesado en cada uno de los servicios que presta cada vocalía, entregándonos siempre sus sabios consejos y sugerencias.
Nuevamente Monseñor nos recalcó la importancia que tiene la Eucaristía en nuestra vida cristiana, nos dijo que "en ella se encuentran presente la mas inmensa manifestación de amor posible para cada cristiano y que no es otra que la presencia viva de nuestro Señor Jesucristo", continuo diciendo que, "siempre la manera de vivir la Eucaristía sera el reflejo de como vive su cristianismo cada hermano y por cierto cada comunidad o movimiento", por lo tanto, nos instó a no soltarnos de la mano del Señor y en especial a continuar dándole la real importancia que tiene la Santa Eucaristía.
Por ultimo, Monseñor nos encargó decirles que nos deja a toda la comunidad cursillista su bendición, para que este movimiento vaya cada día evangelizando los distintos ambientes de nuestra Diócesis, teniendo en lo posible como prioridad a los mas postergados en esta sociedad actual , nos continuo diciendo, que el Señor quiere que todos seamos felices pero también quiere que ellos, los mas postergados, tengan la manera de hacerse participes de su reino por medio de la evangelización.
Nos queda solo reiterarle las gracias al Señor por permitirnos sentir la cercanía y apoyo a nuestro movimiento, de tan importante autoridad para nosotros como lo es Monseñor.
Gracias Señor.

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