martes, 30 de diciembre de 2008

¿Qué deseo en un año nuevo?

Fuente: Catholic.net
Autor: P. Fernando Pascual LC


La pregunta me deja un poco inquieto. Porque sé que el “año nuevo” es simplemente una hoja de calendario, un cambio en los números, una simple tradición humana. Porque el tiempo escapa a nuestro control, y fluye sin cesar.

Pero casi todos, al llegar el año nuevo, damos una mirada al año que termina y soñamos en el año que comienza.

Lo pasado queda allí: fijo, inmodificable, casi pétreo. Con sus momentos buenos y sus fracasos, con sus sueños realizados y con los sueños que se evaporaron en el vacío, con las ayudas que me ofrecieron y con las ayudas que pude ofrecer a otros, con mis omisiones y mis cobardías.

Lo futuro inicia, como inició ayer, como inició hace un mes, como iniciará mañana.

Cada instante se presenta como una oportunidad que en parte depende de mi prudencia y de mis decisiones. En otra buena parte, depende de las decisiones de otros. En los dos casos, y aunque no siempre nos demos cuenta, depende de Dios.

De nuevo, ¿qué deseo en un año nuevo? Desearía la paz en Tierra Santa. Para que nadie privase a nadie de su tierra, de su casa, de su familia. Para que las religiones fueran vividas como lo que son: un camino para unir a los hombres bajo la luz de Dios. Para que la tierra donde vivió, murió y resucitó Cristo testimoniase con un estilo de vida nuevo la gran belleza del Evangelio.

Luego, desearía la paz en tantos lugares del planeta. Especialmente en África, donde todavía unos poderosos venden armas para la muerte pero no ofrecen comida para los hambrientos.

Querría, además, que desapareciese el aborto en todos los países del mundo. Lo cual no es ningún sueño imposible: basta con aprender a vivir responsablemente la vocación al amor para que ningún hijo sea visto como un “enemigo” o un obstáculo en el camino de la propia vida. Porque lo mejor que podemos hacer es vivir para los demás. Porque cada niño pide un poquito de amor y de respeto. Porque cada madre que ha empezado a serlo merece ayuda y apoyo, para que no le falten las cosas que más necesite durante los meses de embarazo y los primeros años de su hijo.

En este nuevo año me gustaría dialogar con quien piensa de modo distinto en un clima de respeto, sin insultos, sin desprecios, sin zancadillas. Porque si él y si yo somos humanos, porque si él y si yo queremos encontrar la verdad, podemos ayudarnos precisamente con una palabra nacida desde los corazones que saben escucharse y, más a fondo, que saben amarse...

El año que inicia querría tener más energías, más entusiasmo, más convicción, para enseñar a los otros lo que para mí es el tesoro verdadero: mi fe católica. Enseñarla, sobre todo, con mi vida. Querría ser, en ese sentido, más coherente, más bueno, más abierto, más disponible, más cercano. Especialmente cuando me encuentre con un pobre, con un enfermo, con una persona triste o desesperada, con quien llora porque sabe lo que muchos no se atreven a reconocer: que ha pecado. Porque sólo cuando me pongo ante mis faltas con honestidad clara y completa, descubro mi miseria y comprendo la de los otros. Y porque cuando reconozco mi miseria y la ajena puedo entender que necesitamos al único que puede limpiarnos con su palabra llena de perdón y de esperanza: Dios.

¿Qué deseo en un año nuevo? Quizá deseo demasiado. Quizá he soñado despierto. Quizá me he dejado llevar por una emoción inconsistente. Mientras, el reloj sigue su marcha, y, sin saberlo, me dice: este año será un poco distinto si te abres a Dios, si rompes con tu egoísmo, si empiezas a vivir no para ti mismo, sino para tantos corazones que encontrarás en los mil cruces de camino de este año que está iniciando...

lunes, 22 de diciembre de 2008

Invitación a vivir una Navidad distinta


Esta es la invitación que todos los años se nos hace en nuestro Encuentro Navideño o Ultreya de Navidad, en donde los niños y también los adultos reflexionamos sobre el real sentido de la Navidad de nuestro Señor.
Esta es la ocasión en que nuestros hermanos nuevos demuestran sus dotes de actuación y a la vez prestan su primer servicio a nuestro Señor, haciendo una liturgia con la representación de nacimiento del Señor.
En esta oportunidad asistieron mas de 400 invitados que disfrutaron de una hermosa y emotiva invitación a compartir una navidad distinta.
Felicitaciones para todos quienes de una u otra manera cooperaron en la ejecución de esta tradicional actividad de nuestro movimiento.
Gracias Señor.

domingo, 21 de diciembre de 2008

Felíz Cumpleaños Programa "De Colores"

Hoy estamos celebrando el primer aniversario de nuestro programa radial "De Colores", que todos los domingos nos acompaña por las ondas de la Radio Familia Chilena surcando los aires de toda nuestra Diócesis.
Desde esta tribuna queremos felicitar a los panelistas Víctor Salgado, Patricia Fernández, Christian Morán y Marcela Villena que semana a semana se esmeran por entregar lo mejor de ellos y de esta manera cooperar con la proclamación del Reino de nuestro Señor en todos nuestros ambientes.
Queremos instarlos a continuar con esta hermosa iniciativa, ya que este durante este primer año de vida han sido innumerables los testimonios que hemos podido escuchar y que claramente nos permiten sentirnos reflejados ante las distintas situaciones e interrogantes que nos plantean cada domingo.
De mas esta decir que este servicio no ha sido fácil, pero estamos seguros que el Señor los premiara en lo secreto y les permitirá seguir muchos años mas con esta nueva e interactiva manera de Evangelizar.
Felicitaciones nuevamente y Gracias Señor.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Boletín Mensual OMCC - Diciembre 2008 -

Queridos Amigos,

¡Que la paz y el amor de Nuestro Señor estén siempre con ustedes!

I.- Eventos e información actual

En este Boletín de diciembre, se vuelve a usar nuestro formato de tres partes.

En el mes de noviembre, tuvimos tres magnificas oportunidades de servir a nuestros amigos cursillistas. La primera fue del 6 al 9 de noviembre en las Islas Saipan. La segunda, del 7 al 9 de noviembre, en la Ultreya Nacional de Celaya México. Y la tercera, el día 22 de noviembre, la inauguración de la “Casa de Cursillos – Eduardo Bonnín Aguiló” en la Archidiócesis de Los Ángeles.

En la oportunidad de servir en las Islas Saipan, Juan Ruiz participo en el 20 Encuentro del Grupo Internacional Asia pacifico. Este fue un verdadero Encuentro de amistad de todos los países del Grupo Asia Pacifico donde se pudo confirmar en vivo y en directo que sin importar el lenguaje y / o la cultura, el mensaje de cursillos que “Dios en Cristo Jesús nos ama” nuevamente se transmitió a través del mejor vehículo que sigue siendo la amistad. También confirmo una vez más, que este Carisma viene directamente del Espíritu Santo y que, sin cambiar absolutamente ni una coma o un punto de su metodología original, sigue siendo tan efectivo como en el primer cursillo de cristiandad.

En este Encuentro de Asia Pacífico también se seleccionó a Australia como el país al que pasará la sede del OMCC empezando en enero del año 2010 y se reeligió a Vietnam en la Diáspora para coordinar el Grupo Asia Pacífico hasta el final del año 2014, lo cual coincidirá con el término del OMCC. Ahora ya todos los Grupos Internacionales coinciden con el término del OMCC. Los felicitamos a los dos países y desde ya cuentan con nuestras oraciones y toda la asistencia que como sede saliente les podamos ofrecer. De hecho, se hará la transferencia de la sede en la IV Ultreya Mundial de Anaheim en Agosto 1, 2009 efectiva al principio del año 2010 para poder trabajar juntos por 4 meses y mantener una continuidad.

En la segunda oportunidad de servicio, Maribel Gomez y el Padre David Smith participaron en la Ultreya Nacional de Celaya México y este fue una vivencia de la Gracia de Dios donde el Movimiento de Cursillos se hizo muy visible por lo que ha llegado a penetrar en la vida cívica tan eficazmente. Antes de llegar a Celaya, Maribel Gomez y el Padre David Smith hicieron una visita al Cardenal Juan Sandoval Iñiguez, nuestro Asesor Episcopal para invitarle a ser el Celebrante Principal de la IV Ultreya Mundial. El con mucho gusto acepto. De ahí se fueron inmediatamente a Guanajuato para la XX Ultreya Nacional de México donde desfilaron más de 20,000 Cursillistas de toda la nación de México por las calles de Celaya vestidos de colores

y de vestuario folclórico para dar comienzo a dos días de Gracia. Inauguraron el evento varios dignatarios incluyendo el Obispo de la Diócesis de Celaya, Lazaro Perez Jiménez, el Gobernador del Estado de Guanajuato Juan Manuel Oliva, y el Nuncio Apostólico Christoph Pierre. Contaban entre los que dieron vivencias el Presidente del Secretariado Nacional de El Salvador Antonio Punyed. Durante los dos días vivieron el amor que vibra en México por su amor a Cristo, Su Iglesia y su Madre Maria. Se celebró el cambio de sede de Morelia a Yucatán y tubo conclusión la XX Ultreya Nacional con la Santa Misa.

Y en la tercera oportunidad de servicio, Maribel Gomez y Juan Ruiz tuvieron el honor de participar en la inauguración de la “Casa de Cursillos – Eduardo Bonnín Aguiló”, el primer lugar del mundo nombrado en su memoria. Esto sucedió en su propia Arquidiócesis de Los Ángeles, California, USA. El Cardenal Roger Mahony, Arzobispo de dicha Arquidiócesis, bendijo las dos capillas de la Casa de Cursillos con el nombre de Santiago y San pablo y celebro la Santa Misa con cerca de 1000 personas representando los 7 grupos culturales (Hispanos, Anglosajones, Vietnamitas, Coreanos, Portugueses, Chinos y Filipinos) que constituyen el Movimiento de Cursillos en la Arquidiócesis de Los Ángeles.

II.- Estudio del Carisma: Parte V

En el Boletín de Febrero se indicaba que un carisma es “un don que da Dios a quien quiere, pero no para el mismo destinatario que lo recibe, sino para que de él se beneficie toda la comunidad y la Iglesia”.

Ese don otorgado por el Espíritu es, por lo tanto, “para el bien de todos”,(1Cor. 12, 7), para el “provecho común”. O sea que ha de estar al “servicio de los demás” (1Pe 4,10). Como en cualquiera de los Movimientos eclesiales, esta característica se halla concretada en el Carisma del Movimiento Cursillos de Cristiandad.

El Movimiento de Cursillos de Cristiandad nace en Mallorca, en la década de los años 40, pero el mensaje regalado no podía quedarse en la persona que lo recibió. Inmediatamente tuvo aplicación de catolicidad. Era urgente acercar el mensaje de Cristo a todos.

“Cuando me incorporé a filas, (en el servicio militar), son palabras de Eduardo, y me relacioné con multitud de personas, cada uno con un carácter diferente, comprendí que Dios le amaba. Entonces empecé a interesarme por darles a conocer esta realidad.”

El fuego que prendió en Mallorca inmediatamente se fue propagando hasta llegar a todos los rincones del mundo:
En 1951 y 1953, se habló de Cursillos en Salamanca y Roma.
En 1953. El P. Sarmiento, dirige un Cursillo, “sui generis”, para mujeres, en Colombia. Y se da un Cursillo en el Santuario de San Miguel de Lliria, en Valencia.
En 1954 se dan cursillos en El Espinar de Segovia, Onteniente, Tarragona y Toledo, con la presencia, aquí, de Manuel Aparici.
En 1955 Se celebra un Cursillo en Roma

Después, el Movimiento de Cursillos de Cristiandad llega a Bolivia y Estados Unidos (1957); Perú y México (1958); Venezuela (1959), aunque se realizado un preliminar en 1957; Argentina (1961), aunque se había realizado un preliminar en 1958; el Primer Cursillo de África se celebra en la Isla de Fernando Poo (1960): en Puerto Rico (1961); llegan a Australia y a Chile (1963); a Perú (1964); a Alemania (1965) y a Vietnam del Sur y Corea (1967)

Todo el mundo puede disfrutar del regalo que Dios ha querido otorgar a través del Movimiento de Cursillos.

Los hombres y mujeres cursillistas procuran llevar a todos los ambientes la Buena Nueva de que Dios nos ama, fermentando con su testimonio de amistad el metro cuadrado móvil en el que el Señor ha querido colocarles. El Arco Iris DE COLORES, que luce en el cielo de los corazones, es fiel testimonio de que el Movimiento de Cursillos de Cristiandad “recorre con carta de ciudadanía los caminos del mundo". (Roma, I Ultreya Mundial.28 de Mayo de 1966)

Solo falta hacer un cursillo en la Luna. Y ... estamos en ello !!!

RECONOCIDO POR LA JERARQUÍA

Se indicaba en el boletín de febrero, como cuarto elemento de los Carismas, el reconocimiento por la Jerarquía. El Movimiento de Cursillos de Cristiandad ha estado reconocido por la Jerarquía desde su inicio.

Fueron muchos los sacerdotes que dieron apoyo espiritual y fáctico al cursillo desde el primer día apoyando. La presencia y labores de los mismos no aparecerá en letras de imprenta, pero el mejor diez es el que Dios pone en los corazones. Son tantos que una relación podría incurrir en algún olvido y el nombre de muchos no es mejor que la ausencia de uno solo.

El primer reconocimiento jerárquico de los Cursillos corresponde, ineludiblemente, a Monseñor Hervás, al que se le debe reconocimiento áureo. El Obispo Hervás, se percató en seguida de las novedades que estaban pululando por el cielo mallorquín e inmediatamente se interesó por ellas. Se entusiasmó con los cursillos que se realizaban en su diócesis de Mallorca y bendijo con las dos manos el regalo que había hecho el Señor al mundo mediante el Carisma de los Cursillos.

En la Asamblea, celebrada en noviembre de 1949, ante la insistencia de los cursillistas presentes, ensalzó a Cursillos con un reconocimiento espiritual, proclamando una alabanza para siempre:

“Quiero contestar a un concepto que ha flotado varias veces en esta reunión: el de los Cursillos. Amadísimos jóvenes: los bendigo y los apruebo. Y los bendigo, … no con una sola, … sino con las dos manos” (20 de noviembre de 1949, Asamblea de Jóvenes de A.C. cursillistas)

“Desde este momento los cursillos fueron más cursillos, ...”, manifestó, en un grito de ilusión, Eduardo Bonnín.

Esta bendición a “dos manos”, la sucesión ininterrumpida de tantos cursillos y los milagros de conversión que provocaron en miles de cursillistas impulsó a la Jerarquía eclesiástica a ensalzar, alabar y bendecir el Carisma del Movimiento de Cursillos Cristiandad, reconociendo la gran labor apostólica que se realizaba por sus miembros.

El Cardenal Arzobispo de Tarragona, D. Benjamín de Arriba y Castro, llegó a expresar que Cursillos resultó ser: “Una de las impresiones más fuertes de mi larga vida”

Pablo VI reconoció el Carisma de Cursillos ante los cursillistas reunidos en su entorno y para ante el conocimiento de todo el mundo.

“Cursillos de Cristiandad, palabra que recorre con carta de ciudadanía los caminos de la Iglesia y del mundo” (Roma, I Ultreya Mundial.28 de Mayo de 1966)

La fe del Papa en el Moviendo de Cursillos de Cristiandad llevó a Su Santidad a manifestar, en un reclamo de esperanza:

“Cursillistas, Cristo, la Iglesia y el Papa ... cuentan con vosotros” (Roma, I Ultreya Mundial.28 de Mayo de 1966)

Sin que faltara su apoyo para vivir siempre estos ideales cristianos en el metro cuadrado en el que el Señor nos ha colocado:

“¡Animo, Cursillistas! Peregrinad los caminos del mundo llevando en vuestro rostro, con firmeza y serenidad, el sello divino de la gracia. Que florezca en todo el mundo, con mil colores, vuestra amistad con Cristo”. (Papa Pablo VI en su mensaje a México. II Ultreya Mundial, 21.05.1970)

Juan Pablo II mantiene la misma línea de Pablo VI. Reconoce Cursillos y ratifica el campo de apostolado concreto al que pertenece la finalidad del Carisma del Movimiento, según fueron inspirados en su inicio:

“Evangelizar los ambientes en el tercer milenio cristiano: un desafío para los Cursillos de Cristiandad” (Roma. III Ultreya Mundial. 29 julio 2000)

Así es el auténtico reconocimiento del Carisma de Cursillos de Cristiandad por la Jerarquía.

El reconocimiento de un Carisma, con “aportaciones nuevas” a la Iglesia, en palabras del Cardenal Josef CORDES. Sin necesidad de que sea necesaria una norma legal. Porque, y afortunadamente, como se indicaba en el boletín de septiembre, el Espíritu no se deja controlar, sopla donde quiere y revitaliza continuamente la Iglesia a pesar de que se le quiera enjaular con leyes y dogmas.

La finalidad de los carismas hace necesaria la existencia de un control, cierta disciplina, para que quien lo posee no se deje llevar en su uso por los impulsos interiores; también es necesaria la obligación de controlarlos para que contribuyan al bien común. Pero se ha de tener en cuenta que la disciplina no es oponerse al Dios que “inspira”, sino adaptarse a la finalidad de la inspiración, que no es para la utilidad del profeta, sino de la comunidad.

En la Iglesia no deben existir ni clérigos ni laicos… La Iglesia es una comunidad de iguales en dignidad.

Los nuevos Movimientos no son alérgicos a la teología, pero sí lo son, sin embargo, a aquellas fórmulas ideológicas o doctrinales que dan por supuesto lo que no debe darse. Son afines a una teología práctica, que es aquella que no halla incompatibilidad alguna, sino más un asombroso abrazo armónico entre las verdades fundamentales de la fe y la vida. Hay que romper cualquier justificación que explique el mensaje del Amor pretendiendo imponer un corsé que oprima o reprima.

“La Iglesia, si bien sea un cuerpo, es el cuerpo de Cristo, por lo tanto un cuerpo espiritual, como dice San Pablo. La Iglesia no es una organización internacional, no es un cuerpo administrativo, ni de poder… es un cuerpo espiritual”. (Benedicto XVI a los párrocos romanos 22-02-2007)

Envía, Señor, tu Espíritu y renovarás la faz de la tierra.

Como nuestro siguiente Boletín será el primero de Enero del año 2009, queremos aprovechar esta oportunidad para desearles a todos y cada uno de ustedes una “Feliz Navidad y un Prospero Año Nuevo” en compañía de todos sus seres queridos.

Y como siempre, nos despedimos rogándole a Nuestro Señor nos mantenga unidos en su amor y amistad.


De Colores,

Juan Ruiz
Presidente - OMCC

martes, 9 de diciembre de 2008

Gran Concurrencia a Paseo Familiar del MCC


Con un sol abrazador se efectuó nuestro paseo familiar de todos los años, como siempre los que mas disfrutaron fueron los mas pequeños que junto a sus padres pudieron participar en alguno de los tantos juegos preparados para la ocasión. Como siempre esta actividad se ve realzada con la celebración de la Santa Eucaristía presidida por nuestro querido Padre Carlos, quien en su homilía nos hizo reflexionar sobre nuestra Santa Madre La Virgen María, a quien celebramos todos los 8 de Diciembre en la culminación del mes oración dedicado a ella.
La tarde finalizó con la respectiva premiación a los ganadores de los distintos juegos y compartiendo unos espectaculares completos.
Gracias Señor.

domingo, 7 de diciembre de 2008

"Que Alegría Servirte Señor"


La alegría de servir fue el denominador común del servicio prestado por algunos hermanos de nuestros querido MCC, que acogieron el llamado de nuestro Obispado a prestar el servicio de entregar un refrigerio a los peregrinos que ascendieron al Cerro La Virgen hoy en la tarde.
Fueron ocho las estaciones que se establecieron para esta ocasión, en donde se les entrego a los peregrinos un vaso de jugo o agua heladita y además de mas de alguna oración preparada con mucho cariño para esta especial manifestación de la Piedad popular de nuestra ciudad.
Solo nos queda darle las gracias al Señor por todos nuestros hermanos que con mucho cariño acogieron el llamado a prestar este servicio.
Gracias Señor.

Presentación de los obispos chilenos al Papa

CIUDAD DEL VATICANO, sábado, 6 diciembre 2008 (ZENIT.org).- Publicamos las palabras pronunciadas ante el Papa Benedicto XVI por el presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, monseñor Alejandro Goic Karmelic, obispo de Rancagua, durante la visita ad limina apostolorum, el 4 de diciembre de 2008.

* * *




Querido Santo Padre:

Con inmensa alegría hemos llegado hasta la morada de los apóstoles Pedro y Pablo, sede del Vicario de Jesucristo, para expresarle nuestra plena comunión y para confirmarnos en la fe. 



Venimos después de cinco días de Retiro Espiritual en Tierra Santa, don de Dios para todos nosotros. Contemplamos al Señor, nuestro Único Salvador, en la tierra que lo vio nacer, crecer, y donde anunció su Reino. En la tierra donde fue crucificado y donde resucitó. 



Parafraseando a Juan Pablo II podemos decir: "Algo nuestro se quedará, tierra santa, te quedará nuestro silencio. Y mientras tanto te llevamos dentro para ser como tú, lugar de testimonio. Nos vamos, pero marchamos como testigos, nos vamos para atestiguar lo que ha pasado a través de los milenios". 



Como humildes servidores de la Iglesia que peregrina en Chile, somos portadores del saludo y afecto de nuestro pueblo. En diversas ocasiones, como la canonización de san Alberto Hurtado, la visita de la Presidenta de la República o la ocurrencia de episodios dolorosos para nuestra patria, los chilenos hemos sabido de su preocupación y cariño de pastor, que agradecemos en nombre de nuestros compatriotas.



Una especial gratitud nos motiva en estos meses, al cumplirse los treinta años del inicio de la Mediación de la Santa Sede en el conflicto limítrofe con Argentina. La historia sabrá reconocer la valiosísima labor cumplida entonces por representantes vaticanos, y que hizo posible que las vías de la razón y del diálogo abrieran camino a la paz con la hermana nación, paz que nuestros pueblos anhelaban y anhelan con todo su ser.



En ésta, la primera visita ad limina apostolorum que realizamos obispos chilenos durante su Pontificado, queremos agradecer su Magisterio, que se traduce en enseñanzas de extraordinaria vigencia en medio de las realidades que vivimos. Un regalo singular para nuestra Iglesia han sido sus encíclicas Dios es amor y Salvados en Esperanza, y la exhortación apostólica sobre la Eucaristía Sacramento de la Caridad, textos que han sido savia renovadora para nuestras comunidades, en tareas siempre desafiantes: conocer cada día más y mejor a Jesucristo; nutrirse espiritualmente en una asidua vida sacramental, fuente inagotable de la gracia de Dios; comunicar en sus ambientes y a través del testimonio personal, la gran riqueza del Evangelio, "para que nuestros pueblos tengan Vida". Para nosotros, en nuestro servicio en Chile, también ha sido fundamental su enseñanza, que agradecemos vivamente, en temas de tanta trascendencia como la laicidad y autonomía de lo temporal, fe y política, fe y cultura.



Traemos hasta acá, Santo Padre, la realidad de los grupos humanos cuyo cuidado pastoral nos ha sido confiado. Un país que se prepara para celebrar doscientos años de vida independiente, dando pasos importantes para superar momentos de dolor y división, y tratando de encarar las grandes deudas de nuestra sociedad hacia los más pobres y vulnerables. Sentimos que nuestra palabra profética, guiada por la Enseñanza Social de la Iglesia, ha sido y sigue siendo un deber inexcusable, en favor de una promoción humana integral, sustentada en el respeto a la vida y la dignidad de la persona. 



Santo Padre, le presentamos hoy nuestras Iglesias particulares, en sus 27 jurisdicciones, que procuran ser luz y sal en medio de sus culturas. Actualmente, nuestras comunidades están viviendo un especial momento de gracia: este "nuevo Pentecostés" que ha significado el acontecimiento de Aparecida, la V Conferencia General del Episcopado de América Latina y el Caribe, hoy se traduce en una Misión Continental, que en Chile emprendemos con vivo entusiasmo, encarnando en ella nuestras recientes Orientaciones Pastorales 2008-2012.

Con gozo y esperanza queremos compartirle, Santo Padre, que, progresivamente, las comunidades de nuestra Iglesia han ido asumiendo como propio el reto fundamental que los pastores en Aparecida nos invitan a afrontar: "mostrar la capacidad de la Iglesia para promover y formar discípulos y misioneros que respondan a la vocación recibida y comuniquen por doquier, por desborde de gratitud y alegría, el don del encuentro con Jesucristo. No tenemos otro tesoro que éste" (1). 



Sí, Santo Padre, no tenemos otro tesoro que la grandeza de experimentar en nuestras vidas al Dios-en-nosotros que comparte nuestra humanidad, que nos muestra al Padre y nos proclama la Buena Noticia de la Salvación, da sentido a nuestra vida y respuesta frente a las angustias de nuestros contemporáneos. 



Por eso recordamos con viva pasión sus palabras inaugurales de la conferencia de Aparecida: "sólo quien reconoce a Dios, conoce la realidad y puede responder a ella de modo adecuado y realmente humano. La verdad de esta tesis resulta evidente ante el fracaso de todos los sistemas que ponen a Dios entre paréntesis" (2). Esta Visita nos confirma que el gran servicio que la Iglesia puede aportarle a Chile es precisamente ése: entregarle al Señor, nuestro mayor tesoro. 

En nuestro país este impulso misionero que brota de Aparecida se ha traducido en las Orientaciones Pastorales que marcarán el caminar de nuestra Iglesia por los próximos cinco años. Creemos firmemente en la acción del Espíritu Santo que se manifiesta en diversas instancias fraternas y participativas, como sínodos y asambleas en diócesis y a nivel nacional, y cuyos frutos se hacen evidentes en estas mismas Orientaciones y en la propia vida de nuestras Iglesias diocesanas. 



Quisiéramos evocar, en este momento de comunión con nuestro Pastor y con la Iglesia Universal, a hombres y mujeres nacidos en nuestra tierra y cuyas vidas de santidad nos han mostrado caminos certeros de encuentro pleno con Jesucristo. Teresa de Los Andes, joven mística; Alberto Hurtado, apóstol de la espiritualidad cristiana y de la justicia social; Laurita Vicuña, niña creyente que ofrece su vida por la salvación de su madre; Ceferino Namuncurá, hijo de las comunidades originarias del sur de Chile; y nuestro hermano en el Episcopado, Mons. Francisco Valdés Subercaseaux, cuya causa de beatificación avanza por la gracia de Dios y para regocijo de nuestra Iglesia. En la fe de estos testigos del Evangelio, y de tantos otros que supieron ser discípulos misioneros de Jesucristo en las realidades que les tocó vivir, confirmamos también la fe nuestra junto al Pastor Universal.



Santo Padre, agradecemos su acogida, su oración, su palabra iluminadora. Lo hacemos con renovada fe, con gozo y esperanza. En estos días, que Chile consagra como "Mes de María", por su intercesión confiamos al Señor su Ministerio y el nuestro, para bien de la Iglesia, e imploramos su bendición apostólica.



lunes, 1 de diciembre de 2008

Saludo de Adviento de Matrimonio Presidente del MCC‏


Estimados Amigos y Hermanos del Movimiento de Cursillos de Cristiandad:
Un afectuoso saludo para cada uno de Uds., a sus familias y familiares, a sus ambientes en su metro cuadrado móvil. Estamos comenzando en el calendario nuestro el último mes del año, donde comenzamos a realizar balances en nuestros trabajos y también acerca de nuestras vidas. Comenzamos el tiempo de Adviento, que es tiempo de Esperanza, para cada uno de nosotros en lo personal, como Movimiento en lo comunitario. Así darle gracias al Señor por todo lo vivido durante este año, por toda la hermandad que hemos ido edificando para el Señor a través del Carisma del Movimiento de Cursillos de Cristiandad, que por medio de su método y estrategia ha permitido, como nos invita Aparecida, a tener un Encuentro con Él, para después compartir con los demás lo que estamos viviendo.
Estamos mirando hacia el final de los tiempos como término del año, pero un tiempo de gozosa esperanza donde también miramos hacia la Navidad, y el mirar con esperanza significa gozar ya, de alguna manera, lo que se acerca: Que Jesús renazca en nuestros corazones, para que se encarne en nuestras vidas personales y de trabajo (que es uno de nuestros ambientes). Pero también es un tiempo de estar vigilantes, pues la vida es hermosa, pero también podemos equivocarnos, por ello los invitamos a vivir este período de Adviento pensando en la idea que "Nuestro Señor viene"; se hace presente, de distintas maneras, a través de diversas circunstancias, a través de distintas personas, en fin que aclamemos juntos como comunidad del MCC: "Ven, Señor Jesús". Porque como dice San Pablo a los cristianos de Corinto que "hemos sido colmados en Él con toda clase de riquezas, las de la palabra y las del conocimiento, en la medida que el testimonio de Cristo se arraigó en ustedes". La invitación a que comunidad realicemos los tres esfuerzos que nos pide este tiempo de Adviento: A prepararnos interiormente, a realizar oración permanente con el Padre Bueno y estar atentos y vigilantes preocupándonos de los demás; para que así digamos y nos digan: Mira como se quieren.
Que nuestro Padre Bueno los bendiga a cada uno de Uds. y su famila, que el Señor Jesús les señale el camino a seguir que es Él y nuestra Madre la Virgen los cubra bajo su Manto Protector, los saludan con mucho afecto y cariño porque DE COLORES se vive mejor, sus hermanos en Cristo

Marcela Villlena y Christian Morán
Matrimonio Presidente del MCC de la Diócesis de Talca